Una tarde contigo.

Cuando veo tu rostro por primera vez todos los días, me produce ese nose que tan grato porque te tengo conmigo, porque sera otra de esas tontas tardes en que no hacer nada puede traer una caminata eterna, jugar a las escondidas, buscar tesoros, toparse con una aventura extrema, ir por una misión imposible, o tener las incoherencias mas entretenidas, que me pueda brindar mi mente para verte sonreír.
Ir de allá para acá haciendo hasta lo imposible para que todo sea de las dos, para compartirlo todo, para no separarnos tanto tiempo, para  tener la capacidad máxima de recuerdos por día, que nos haga sentir bien cuando solo se nos ocurra. Una tarde contigo es más que entretenida, es más que una rutina, es más que un momento especial, es todo lo que yo quería en mi vida, la belleza simple de la vida. Reír, cantar, bailar, gritar, actuar, soñar y decir estupideces, crear, escribir y pintar, todo brote de tu ser.

Los malos momentos... son solo destellos de la realidad, esa que no conocemos mas cuando nos separamos, un detalle my mínimo, que no es un porcentaje valuable a todo lo bonito que tengo en una tarde contigo.